Ciudad de México- El Santuario Ostok, un refugio clave en el rescate y protección de fauna silvestre en Sinaloa, ha sido víctima de un asalto armado. Delincuentes fuertemente armados despojaron a su equipo del vehículo utilizado para rescatar y alimentar a cientos de animales. El hecho ha generado gran indignación y preocupación sobre el futuro de las operaciones de rescate en la región.
Un golpe al rescate de la fauna silvestre
Este jueves 20 de febrero, personal de la Unidad de Rescate del Santuario Ostok fue interceptado al salir de la ciudad de Culiacán. Con armas largas y extrema violencia, los criminales les arrebataron su camioneta PickUp Ford Super Duty, equipada con herramientas especializadas para el rescate de grandes felinos, reptiles y aves rapaces. Además de ser un transporte crucial para rescatar animales, el vehículo era utilizado diariamente para llevar alimento a los habitantes del santuario.
El presidente de Ostok Sanctuary, Ernesto Zazueta, lamentó profundamente la situación y denunció la creciente ola de violencia en el estado. “Afortunadamente mi equipo está bien, aunque asustado y estresado. Pero no se vale que vivamos con miedo constante. Nos arrebataron algo material, pero para nosotros era una herramienta invaluable para salvar vidas”.
Cierre del santuario: Una difícil posibilidad
Zazueta expresó su frustración ante la crisis de inseguridad que afecta tanto a la población como a la fauna silvestre en Sinaloa. Reveló que han considerado cerrar el Santuario Ostok, como lo han hecho más de mil negocios en el estado debido a la violencia. Sin embargo, afirmó que abandonar a los animales rescatados no es una opción.
“La Secretaría de Economía estatal reporta que más de 1,100 empresas han cerrado debido a la violencia. La Fiscalía señala que en solo cinco meses se han robado más de 2,100 vehículos. No se puede vivir ni trabajar así, pero tampoco podemos abandonar a los animales que necesitan ayuda. Exigimos a las autoridades que usen toda su inteligencia y recursos para sacar a Sinaloa del infierno que estamos viviendo”, declaró.
Exigencia a las autoridades
El Santuario Ostok ha denunciado en múltiples ocasiones la falta de apoyo por parte de las autoridades ambientales, que no cuentan con el equipamiento necesario para el rescate de fauna silvestre. Este robo no solo representa una pérdida material, sino un duro golpe a los esfuerzos de conservación y rehabilitación de animales en peligro.
El llamado es claro: se requiere acción inmediata por parte del gobierno para frenar la violencia y garantizar la seguridad de quienes trabajan en la protección de la fauna silvestre en Sinaloa.
