Falta de información, discriminación y riesgos de salud
En México, cerca de 20 millones de mujeres enfrentan los efectos del climaterio y la menopausia, una etapa natural de la vida que sigue siendo un tabú en la sociedad. Los síntomas, que pueden ser más de 40, incluyen sofocos, insomnio, cambios en el estado de ánimo, pérdida de densidad ósea y alteraciones metabólicas, afectando la calidad de vida de quienes lo atraviesan.
Si bien este proceso biológico es inevitable, su impacto en la salud física y emocional puede minimizarse con el acceso a información y atención médica adecuada. Sin embargo, en muchos casos, las mujeres enfrentan esta transición en soledad, sin apoyo suficiente en el ámbito social, familiar o laboral.
Un problema de salud pública ignorado
Organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han advertido que la menopausia es un desafío de salud pública. La falta de información y políticas de atención integral aumenta la vulnerabilidad de las mujeres a enfermedades como osteoporosis, diabetes, hipertensión y depresión.
En México, la Comisión de Salud del Senado ha reconocido los conflictos que enfrentan las mujeres en esta etapa, destacando la carencia de políticas públicas para abordar el problema. A pesar de ello, el tema sigue sin recibir la atención prioritaria que requiere.
Discriminación y silenciamiento en el ámbito laboral
El impacto del climaterio y la menopausia trasciende la salud física y afecta también la vida laboral de millones de mujeres. Un estudio reveló que ocho de cada diez trabajadoras en edad de menopausia evitan hablar del tema en sus centros de trabajo por vergüenza, y el 47% oculta la causa de sus ausencias médicas.
Además, el 60% de las mujeres han sido testigos de burlas o comentarios despectivos sobre la menopausia en su entorno laboral, lo que contribuye al silencio y la falta de apoyo. Como resultado, el 11% ha rechazado ascensos debido a la inseguridad provocada por los síntomas.
La urgencia de un cambio: educación y políticas públicas
El climaterio y la menopausia no deben verse solo como un asunto individual, sino como un tema de derechos laborales y de salud pública. Es fundamental implementar estrategias de concientización en centros de trabajo y garantizar acceso a atención médica especializada.
Romper el silencio, eliminar la estigmatización y promover políticas inclusivas es el primer paso para mejorar la calidad de vida de millones de mujeres en México y en el mundo.
